He compartido en este día varias publicaciones, acá las dejo todas reunidas para compartirlas con más facilidad.
¿ES EL TDAH UN DIAGNÓSTICO «NUEVO»?
Hoy 13 de julio es el día mundial del TDAH.
No es un diagnóstico nuevo, es una condición que hemos venido definiendo a lo largo de más de cien años desde que se tienen referencias históricas de publicaciones. Si le interesa leer un poco más sobre ese tema lo remito a este enlace en el que comento sobre la historia de este diagnóstico: https://carlosorellanaayala.com/…/18/historia-del-t-d-a-h/
¿POR QUÉ SE ESTÁ DIAGNOSTICANDO MÁS TDAH QUE ANTES?
Ocurre, prácticamente, lo mismo que con los Trastornos del Espectro Autista en relación al aumento en el número de diagnósticos:
1. Está ocurriendo con más frecuencia que antes. Juan Narbona, neurólogo pediatra español, se preguntaba hace unos años si esto era una cuestión real o algo debido a una sociedad maltrecha. Una concluye que es por ambas situaciones. Esta sociedad que va a prisa, rendida al culto de los resultados, contaminada por todos lados con diversidad de químicos cuyo impacto no alcanzamos a definir y otras influencias no positivas, parece ser el entorno tristemente ideal para ver el aumento de muchos diagnósticos neuropsiquiátricos.
2. Ahora sabemos más. Tenemos mejor perfilado este diagnóstico y además disponemos de experiencia clínica e instrumentos de apoyo al diagnóstico clínico que nos permiten plantear esta categoría diagnóstica con más firmeza o seguridad.
3. Hay una mayor sensibilidad hacia el tema. Somos más conscientes de la realidad que esto implica y el impacto que tiene en la vida de la persona, su familia y su entorno en general.No es una moda, es una realidad. Claro, nos topamos con el problema del sobrediagnóstico, no le llamaría así, le llamaría error en el diagnóstico porque la realidad triste y dolorosa es que la mayoría de las personas con TDAH no está diagnosticadas y, en consecuencia, no están recibiendo las ayudas o apoyos que requieren.
LA COMORBILIDAD EN TDAH ES LA REGLA
Esto significa que cuando planteamos el diagnóstico de TDAH siempre hay que considerar que existe otro u otros diagnósticos comórbidos, es decir que están ocurriendo al mismo tiempo en esa persona.
Las comorbilidades suelen provocar que el cuadro exprese más diversidad de manifestaciones y su manejo de complique en diversos grados.
En TDAH se estima que la presencia de condiciones comórbidas puede presentarse en 60 a 85% de los casos, es decir, siempre tenemos que investigarlas.
De una forma muy general podemos dividir las comorbilidades en tres grupos:
a) Las neuropsiquiátricas: trastorno oposicionista desafiante, trastornos de ansiedad, depresión y otros.
b) Las neurológicas: trastorno del desarrollo de la coordinación, trastorno por tics y otras.
c) Las neuropsicopedagógicas: trastornos específicos del aprendizaje escolar, por ejemplo. Estas, interesanemente, resultan muy prevalentes y podemos encontrarlas en 40 a 60% de los pacientes con el diagnóstico de TDAH.
TDAH, ALTA HEREDABILIDAD.
El TDAH es un diagnóstico con una probabilidad altísima de heredarse. Cuando aparece el diagnóstico de un caso de TDAH en la familia, con mucha probabilidad hay más que no están diagnosticados.
La probabilidad de heredarlo puede llegar a ser igual o un poco superior a 0.7, esto significa que es muy alta para algunos casos.
También acá, igual que en el TEA (Trastornos del Espectro Autista) y varios de los Trastornos del Neurodesarrollo, hay un fenotipo ampliado. Esto significa diversas manifestaciones relacionadas con el TDAH que pueden producir grados muy variados de dificultades sin que el cuadro observado pueda alcanzar un umbral para recibir ese diagnóstico.
¿Cuál es ese umbral? Actualmente disponemos de algunos criterios, pero eso no es suficiente. El criterio más importante es el del clínico que valora y logra verificar que aquello implica dificultades relevantes en el funcionamiento académico, laboral y/o social de la persona.
TDAH Y TRASTORNOS DEL APRENDIZAJE ESCOLAR.
En las clases de la universidad (trabajo con estudiantes de postgrado) o en conferencias sobre esta temática, siempre hago una recomendación: NO DEJAR DE EVALUAR LA LECTURA, ESCRITURA Y CÁLCULO cuando formulamos el diagnóstico de TDAH.
¿Por qué esa recomendación?
Los Trastornos del Neurodesarrollo son altamente comórbidos entre si. Esto es un hecho que no podemos perder de vista. El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo, esto significa que hay probabilidad alta de diagnosticar otro trastorno del neurodesarrollo, como cuadro comórbido.
La comorbilidad entre TDAH y Trastornos Específicos del Aprendizaje Escolar es muy alta, los reportes nos indican que oscila entre el 40 y el 60%, una cifra que nos tiene que alertar.
EL TDAH VA CON NOSOTROS PARA SIEMPRE.
Se estima que 5 a 7% de los escolares presentan TDAH, esto es un dato que se repite alrededor del mundo, con la excepción de Francia que reporta cifras bajísimas. Los porcentajes en adultos oscilan del 2 al 3%.
¿Qué ocurrió, se curaron algunos niños y adolescentes?
Comparto una opinión personal ahora, por favor tomarlo en cuenta. Las dificultades en la atención e hiperactividad/impulsividad que en determinadas condiciones califican para recibir el diagnótico de TDAH, son propias de la persona, constituyen parte de su forma de ser, le acompañan siempre. En consecuencia, no se curan.
Creo que el TDAH es un diagnóstico al que se puede entrar y salir dependiendo mucho del impacto del contexto en la persona. Esto es lo que ha ocurrido con los adultos, no es que se curaron, es que han modificado su contexto y en consecuencia el porcentaje disminuye.
Estos adultos que ahora no reciben el diagnóstico y si lo recibieron antes, han logrado manejar o acomodarse a su entorno, pero, si de pronto ese entorno cambia, pueden manifestar disfunciones nuevamente.Como dicen en la literatura en inglés, es un diagnóstico «long lasting».
No tenemos que verlo como un diagnóstico de niños porque no lo es.
Muchos adultos lograron en su etapa escolar mantener una decuado nivel de funcionamiento y adaptación, esto suele ser explicado por el apoyo de los padre o de la escuela (lo segundo es mucho menos probable), pero cuando ya les corresponde actuar de manera independiente, entonces aparecen las manifestaciones. En adultos es un tema importante porque muchas veces reciben otros diagnósticos que no les corresponden.
Considero que algunas personas adultas que se han autodiagnosticado de TEA, probablemente lo que presentan es un cuadro de TDAH. También otras personas con otros diagnósticos neuropsiquiátricos pueda que su diagnóstico sea TDAH o que el TDAH sea comórbido.

Dr. Buenos días! Mi nombre es María Alejandra González L. Fui su paciente en el año 2007, cuando tenía 14 años. En ese entonces estaba pasando por una mala época en el colegio, debido a que la psicóloga del mismo, hizo un mal diagnóstico, el cuál me trajo muchos problemas. Mis papás querían una segunda opinión y llegamos a usted, quién me evaluó y logró contradecir todo lo que en el colegio creían. Honestamente esa época la recuerdo negativamente por los tratos que recibía por parte de mis maestros y hasta cierto punto, fue traumático para mí. Gracias a sus evaluaciones, me dio mucha esperanza a mí y a mí familia, pude sentir que no era yo el problema como todos creían y me motivó a salir adelante. Actualmente tengo 25 años, soy terapeuta del habla y del lenguaje, estoy a punto de graduarme de psicóloga y el próximo año empezaré la carrera de derecho. El día de hoy encontré el informe que usted realizó, el cual siempre guardé para algún día poder entenderlo. Quisiera agradecerle, porque me he encontrado con casos muy similares y me inspira el poder ayudar a esos niños, como usted lo hizo conmigo. Mil gracias doctor! Desde hace mucho tiempo había querido contactarlo para poder agradecerle. Usted es una persona magnífica que creyó en mí cuando nadie más lo hacía; me brindó la seguridad que necesitaba. Que Dios lo bendiga siempre.
María Alejandra: sabe que su comentario ha llegado muy directo a mi corazón. Me alegran sus triunfos y me siento honrado de haber jugado un pequeño papel en su historia. Siga adelante, por favor.