COVID-19: algunos datos para no alarmanos pero tampoco para dormirnos.

Cuando aparece un brote de determinada enfermedad surgen dos posturas radicales:
a) Los alarmistas, profetas de tragedias que en nada ayudan al conocimiento de la realidad y a la resolución de los problemas. Su estrategia es la «alaraca sin sentido», solo hacen ruido y no ayudan en nada.
b) Los minimicistas, despreocupados e incluso molestos porque se hable del tema. Comienzan a hacer comparaciones con otros diagnósticos para decir que esto no es tan serio, que para qué activar las alarmas. Ellos cambian de parecer cuando les toca de cerca vivir la experiencia, mientras sea algo que ocurre lejos o de lo que se enteran solamente por los medios, mantienen esta postura.

Afortunadamente los sobrios, que manejan el tema con racional y proporcional preocupación, siempre contribuyen a que aprendamos más, estemos mejor preparados para hacer frente al brote si en caso la situación así lo demanda.

ÉBOLA, DENGUE, SARAMPIÓN…
Efectivamente estas enfermedades están causando muchas muertes alrededor del mundo. En el caso del Sarampión se lograría control con la univeralización de la vacuna y mejorar una serie de condiciones de vida, pero el solo hecho de vacunar ya supone un avance muy grande.
Llama la atención tantos preocupados por el sarampión ahora que hablamos del COVID-19 pero que no han dicho nada si esta enfermedad está causando estragos como tener más de 350.000 casos reportados en el 2019 con una letalidad muy alta, como suele ocurrir en el sarampión y de manera especial en la población pediátrica desnutridad de países no desarrollados.
El dengue también mata y la letalidad del ébola es altísima, de las más altas para las enfermedades infecciosas y los brotes van ocurriendo con un poco más de frecuencia y extensión.

Pero no se trata de comparar para minimizar a una en función de otra, se trata de enfrentar las demandas particulares de cada realidad. Claro, se hacen muchas compraciones y los epidemiólogos recurren a ello, la intención es obtener información, crear modelos, etc.

FEMICIDIOS Y MUERTES POR VIOLENCIA…
Algunas publicaciones resultan interrogando que por qué la preocupación por el COVID-19 y no por los femicidios y muertes por violencia en general. Vuelvo a lo mismo del título anterior: no se trata de comparar realidad que en sí pueden no ser comparables, se trata de enfrentar las demandas particulares de cada realidad.
Esto es algo como decir que me preocupa el tráfico en la ciudad en la que vivo pero nadie dice nada del número de aeronaves que aterrizaron en el aeropuerto de Santa Elena, Petén. La relación es muy distante si es que quiero relacionarlos.

Me pregunto: ¿por qué nadie ha hablado de las enfermedades cardiovasculares sin son la principal causa de mortalidad en la actualidad?

COMPARACIÓN
Bueno, si de comparar se trata, comparemos pues. Pero en lo personal creo que cada enfermedad merece su atención en lo particular.

Con los colores del semáforo para entenderlo más fácil. La vacuna del Dengue está en camino, esperemos que se terminen los estudios y sea efectiva. La nota roja en esta comparación se la gana el COVID-19, solo aprobó una de sus asignaturas.

IMPORTANTE SABER:

  • COVID-19 afecta más a personas de mayor edad. ¿Pero quién ha dicho que ellas valen menos? Esto no nos debe dejar tranquilos y ya, merecen nuestra atención y preocupación también.
  • COVID-19 produce en niños cuadros leves e incluso asintomáticos. La población pediátrica (0 a 18 años) representa pocos casos y con muy baja letalidad.
  • La letalidad de COVID-19 es baja. Se ha dicho que ocurre más en personas con condiciones médicas pre-existentes. Ahora bien, casi un tercio de los fallecidos no tenían condiciones médicas pre-existentes, no es nada despreciable el 33% de los casos.
  • Afecta por igual a hombre que a mujeres, sin embargo la letalidad es un poco mayor en hombres.
  • El aislamiento recomendado ante casos sospechosos y confirmados es de 14 días. La definición de caso ha ido variando en el tiempo.
  • Lios síntiomas iniciales son los de un cuadro gripal: tos , estornudos, fiebre, secreción nasal, malestar general. Puede presentarse dolor abdominal y diarrea.
  • Se sospecha que pueda haber transmisión fecal de la enfermedad. Esto hace necesario poner más atención a la higiene en los alimentos que se consumen y en el lavado de manos.
Esta curva epidemiológica llama la atención de cualquier epidemiólogo o médico en general.

El problema fundamental con el COVID-19 es que no tenemos experiencia previa, no tenemos suficientes conocimientos, estamos aprendiendo. Es muy lógico que cause temor y preocupación. No por tonterías se pone en cuarentena a 15 millones de habitantes de 3 ciudades en China, o no se deja desembarbar a los pasajeros de un crucero, o un hotel retiene a casi mil turistas dentro de sus instalaciones, etc.

MEDIDAS SENCILLAS AL ALCANCE DE TODOS:
1) Lavarse las manos con agua y jabón o otulizar un gel antiséptico. La medida ha demostrado su impacto importante con el COVID-19 así como con muchísimas otras enfermedades en general. Es la medida de salud preventiva de mayor impacto en nuestra historia.

2) Use mascarilla apropiada.

3) No toque sus ojos con las manos.

4) Guardemos las distancias entre unos y otros si comenzamos a tener casos en el país.

5) Toser y estornudar volviendo la cabeza a un lado y cubriéndonos con el hueco del codo.

6) Consultar al médico en caso de síntomas relacionados.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.