
¿QUÉ ES EL AUTIDIAGNÓSTICO?
El autodiagnóstico es un proceso que puede ser correcto o incorrecto. Deriva del análisis personal de situaciones, comportamientos, actitudes o vivencias de diferente tipo que realiza la persona y que lo lleva a concluir que esas manifestaciones encajan en un diagnóstico específico.
Algunas veces esos autodiagnósticos son apoyados por escalas o pruebas a las que la persona ha tenido acceso.
Esto tiene algunos inconvenientes:
- Existe mucho traslape entre trastornos del neurodesarrollo y hay momento en la vida en la que diferenciar uno de otro puede resultar complejo incluso para alguien dedicado a ello
- También ocurre traslape entre los trastornos del neurodesarrollo y otros cuadros neuropsiquiátricos
- El uso de manuales diagnósticos demanda la instrucción específica y el entrenamiento concreto en ello. Aunque son de acceso popular eso no quiere decir que el manejo de estos sea popular. Incluso entre profesionales dedicados a la salud mental-neurociencias puede existir discrepancia de opiniones con respecto a estos manuales y es pertinente decirlo que también algunos no tienen el suficiente conocimiento para ello (lamentable).
- Recurrir a test de screening y pruebas psicométricas de cualquier tipo requiere de mucha preparación técnica-profesional. No es un tema fácil. Y la psicometría no está diseñada, en principio, para sentar a una persona frente a una computadora a responder test, demanda de interacción estrecha, de mucha observación y acompañamiento.
AUTODIAGNÓSTICOS CORRECTOS
Comentábamos con Sarín González sobre el infradiagnóstico o subdiagnóstico de autismo en mujeres. Es una realidad a la que me introdujeron los frecuentes comentarios y conferencias de Lola Garrote Petisco, un profesional extraordinario que nos ha hecho conciencia sobre este tema desde hace un buen tiempo. Algunas mujeres autistas terminan descubriendo que algo ocurre en ellas y explica el conjunto de sus vivencias que pueden llegar al sufrimiento y la incomprensión, algo que leí en una explicación de Carmen Molina (Sedres) y me parece muy acertado de hacer ver.
Las mujeres autistas, en conjunto, tienen mejores habilidades sociales y comunicativas, además desarrollan de mejor forma el mimetismo y camuflaje, entonces pueden pasar, hasta cierto punto “desapercibidas”, pero esto no implica que la vida en sí resulte compleja, con dificultades de diverso grado, hasta el sufrimiento interior que describió Carmen en un comentario.
Por ello encontramos frecuentes autodiagnósticos en mujeres y resultan siendo acertados cuando son corroborados por profesionales competentes en la materia, algo que en mi opinión es necesario hacer, aunque no siempre ocurre. En el caso de los autodiagnósticos en varones esta posibilidad existe, pero los cuadros autistas son más evidentes en la población masculina y generalmente ellos han recibido el diagnóstico profesional en algún momento de su vida, no es frecuente que queden sin este diagnóstico aunque todos creo que hemos tenido algún paciente masculino que llega a consultar hacia el final de la adolescencia y termina recibiendo el diagnóstico de Trastorno del Espectro del Autismo, pero no es una situación frecuente aunque si puede ocurrir porque también hay hombres autistas que logran más e incluso altas habilidades adaptativas (por aprendizaje, imitación o por camuflaje) y comunicativas.
Hay un grupo grande de personas autodiagnosticadas de TEA y con diagnósticos que, a pesar de no estar verificados por profesional competente, son certeros, correctos y contribuyen a explicar muchas cosas de la vida de las personas que se han autodiagnosticado, les permiten ver las cosas y explicarlas, entender el mundo y entenderse a sí mismos. Conozco a varias personas sin un diagnóstico formal, pero que tienen un diagnóstico certero de TEA.
AUTIDIAGNÓSTICOS INCORRECTOS Y SUS RIESGOS
El riesgo mayor es que la persona que se ha atribuido el diagnóstico de autismo o de trastorno autista puede tener alguna de las siguientes posibilidades:
- No tener ningún diagnóstico en realidad sino algunas dificultades que con el apoyo específico se resolverían
- Tener otro diagnóstico que requiera apoyo psicológico y/o psiquiátrico pero la persona se acomoda al diagnóstico de autismo y rechaza las intervenciones que necesita. Esto puede incluir trastornos ansioso-depresivos, trastorno bipolar, trastorno límite de personalidad, trastorno obsesivo-compulsivo, esquizofrenia o algunas condiciones médicas neurológicas. El problema es que algunos de estos diagnósticos pueden ser comórbidos con el autismo y eso dificulta un poco más el proceso diagnóstico porque podrían ser ambos cuadros.
- Niveles variables de disfunción. Esto es lo que provoca algunas de las respuestas agresivas que se verifican en redes sociales y que no corresponden a las respuestas que uno esperaría de una persona con diagnóstico real de trastorno del espectro del autismo.
DESDIBUJANDO EL AUTISMO
Un problema muy grande con los autodiagnósticos es que algunos de ellos desdibujan al autismo y sus trastornos, presentan un perfil que no corresponde y traslada una imagen que no es real. Así como Khan, Rain Man, The Good Doctor y otros personajes presentan imágenes parcializadas del autismo, una persona con autodiagnóstico incorrecto también lo hace.
Así podemos terminar considerando que ser autista es algo “cool”, por un lado, o que ser autista es algo terriblemente disfuncional con respuestas disociales, agresivas, muy disruptivas, etc.
También es cierto que los autodiagnósticos correctos nos han permitido conocer más sobre el autismo, por ejemplo el autismo en mujeres.
El autismo es un tema serio que merece abordaje serio.
Yo soy varón de 53 años de edad recién autodiagnosticado. Usted menciona que es muy raro en un varón no ser diagnosticado. Pero no toma en cuenta a las generaciones mayores. Cuando yo era niño únicamente existía el diagnóstico de Khaner, el de Asperger se publicó en los EEUU cuando yo tenía 30 años de edad. Y el diagnóstico de aplicaba a adolescentes. ¡claro que pase desapercibido, y muy fácilmente! Un niño con buenas calificaciones y que nunca se metió en problemas no necesitaba tratamiento de psicología. Solamente una vez mi padre me llevó a un pediatra por que a él le molestaban mis estereotipias; pero no me recetaron nada, gracias a Dios. Yo tuve un desarrollo precoz, en el habla y otros, así que ¿ por qué preocuparse?
¿Para que me sirve un diagnóstico profesional?
No hay programas o terapias para adultos, pero necesidades si tengo. Problemas de comunicación, problemas de «empatía «, problemas de sociabilizar, problemas de función ejecutiva, hipersensibilidad sensorial.
Cuestiones que impactan mi vida del diario, que han limitado mi desarrollo profesional y mi relación matrimonial. Además de grandes pérdidas económicas por problemáticas de la función ejecutiva.
Muchas gracias Miguel Ángel. Tiene razón en todo su comentario, de principio a final.
Efectivamente no hay muchas oportunidades de intervención o acompañamiento.
Yo rondo la edad de Miguel Ángel Otero Jiménez pero me encuentro con una dificultad añadida pues soy mujer transexual en el clóset. Seguramente me suicidaré en cuanto fallezca mi anciano padre (también ásperger) porque los poquísimos alicientes que he encontrado a mi vida han tenido que permanecer secretos e incumplidos para no añadir bullying extra al ya cotidiano.
Debe ser muy difícil. El bullying duele, aún llevo las heridas de la escuela, a veces creo que han sanado, pero de pronto duelen de nuevo. Le mando un fuerte abrazo, no sé qué más escribir, me he quedado tratando de imaginar lo que cuenta, imaginarla a usted. Bueno, pues por acá estoy si en algo puedo servir, no converso mucho, pero acá estoy.
Hola,
Soy una chica de 18 años y llevo unas cuantas semanas pensando en si tengo autismo… Pero no quiero precipitarme, no quiero parecer que busco atención o algo parecido. Me lo estoy tomando muy en serio.
Durante mi proceso de autodiagnóstico, he estado leyendo e informándome sobre el espectro autista y sus diversos síntomas a partir de artículos diversos (la gran mayoría de ellos hechos por personas autistas y médicos profesionales), y me siento bastante identificada en ellos. Sin embargo, reitero que no quiero abalanzarme a una conclusión rápida.
Mi pregunta es: son todos los síntomas obligatorios en el autismo? Quiero decir, es válido presentar solo 3 de cuatro o cinco síntomas? Presento varios síntomas, pero hay uno, como el de la conducta restrictiva (que he de suponer, se refiere a las tan religiosas rutinas realizadas por los autistas) al que no me relaciono. No tengo ningún tipo de rutina especial… que yo recuerde. Además, sigo una vida bastante normal…
Repito: no pienso que el autismo sea una cosa «cool» como mencionó antes, solo quiero saber si lo que me pasa tiene nombre.
Para poder librarme de dudas, agradecería mucho que me contestase este comentario. Esto del autodiagnóstico es muy pesado…
Muchas gracias y siento mucho si he ofendido a alguien.
Hola Suvi. Está en todo su derecho de buscar explicaciones, razones que den sentido a vivencias y permitan plantear el abordaje de la vida.
Es importante ir a la historia personal, lo más remoto posible y tratar de buscar cuestiones en la niñez. Luego la orientación de un buen profesional ayudará mucho. Aunque le diré que hace falta mucha formación para detección del autismo en la vida adulta, especialmente en mujeres.
Deseo que puede encontrar orientación sobre esto.